Una reinvención de los cuentos de hadas, un enfoque más bien oscuro de personajes fantásticos, que rozan lo real, por lo que es fácil identificarse con algunos. Infidelidad, asesinato doloso, belleza-fealdad, inmortalidad, fantasías descontroladas, extravagantes matrimonios, amores que parecen odio. Aguilar nos recuerda que en la ficción y en la realidad no hay mucha nobleza en la raza humana y que las bajas pasiones gobiernan las mentes débiles de los apestosos humanos. Una dosis importante de sangre, sudor y lágrimas, mediante una visión auténtica de las mujeres, más allá de los prejuicios.