La agricultura comercial se convirtió en la principal actividad económica en Sinaloa durante el siglo XX y en una de las más sobresalientes en el ámbito nacional. Por ello, el estudio del desarrollo agrícola que ocurrió durante todo el siglo es necesario para entender tanto las condicionantes como los factores que influyeron en la culminación de este proceso, entre los que destacan el comportamiento de la demanda del mercado internacional de productos agrícolas, la construcción de grandes obras hidráulicas, el incremento de la superficie irrigada, una mayor mecanización, el uso de semillas mejoradas y de fertilizantes, además del financiamiento público y de la actividad empresarial del sector privado, y la creación de organizaciones por parte de los productores, lo que les permitió defender sus intereses, así como una mayor racionalización de los recursos.