Este libro es un atrevimiento, porque en cada página, pude reencontrarme a mí misma, enfrentarme con mis más grandes miedos, anhelos, limitaciones mentales, fracasos y logros. A través de esa introspección, fue que empecé a sanar mi enfermedad crónica, por lo cual, este libro también es un agradecimiento a todas las mujeres, que sin saberlo, me han ayudado a reconstruir mi vida, la que dicho sea de paso, no es ni remotamente perfecta, pero he aprendido a abrazar, a surfear en sus altas y sus bajas. He aprendido a ser feliz como soy y con lo que tengo. Considera que estas líneas son, también, una solicitud de amistad para ti, para que, sin conocernos, podamos reír, llorar, recordar, reflexionar y aprender juntas. La de treinta y tantos.